Un dato demoledor si, pero tan real como la vida misma. Gracias a Nacho he descubierto este dato que nos ofrecen en el ForumLibertas.com y que además nos ofrece datos escalofriantes sobre la realidad en la que Internet se mueve actualmente.

1885 Falta de recursos para la protección de los menores.

Se pide que se aumenten los recursos públicos y privados para proteger a los menores de contenidos inadecuados y de la lacra de la pornografía infantil.

Este echo viene muy bien para recordarnos el caso Marcelino y Live Spaces. Un plataforma de blogs que ha dado el paso hacia las Redes Sociales, pero que ha descuidado la seguridad de su red en favor del lucro que generan. Como bien dice Marcelino, “si se gasta dinero en seguridad, el negocio deja de ser rentable”, y ahí está el germen que hace que la pedofilia campe a sus anchas en la red.

Cien mil webs con pornografía infantil en todo el mundo.

Eso significa que hay un número inconmensurable de niños que están, han sido y van a ser, vejados por animales disfrazados de seres humanos. También son exactamente el doble de webs de este tipo que hace diez años, lo que ha provocado que el número de fotografías de este tipo en la red se haya multiplicado por 1500.

Solo dos de cada diez ordenadores en casa tienen un sistema de control de acceso para menores de edad.

Si bien es cierto que no se puede echar la culpa de este desmadre a los usuarios por que no tengan este tipo de dispositivos de seguridad, no podemos olvidar que los responsables de lo que nuestros hijos hagan con el ordenador somos nosotros.

Así mismo, y como dije el otro día,  los principales responsables de que esas fotografías estén en la red no somos los usuarios, si no las autoridades y las empresas que dilatan en el tiempo cualquier decisión referente a una de estas denuncias y sin embargo se abocan prestos y dispuestos a cerrar blogs por una simple opinión o denuncia. Y aquí volvemos a recordar a Marcelino y la censura que ha padecido directamente de manos de la plataforma de Microsoft Windows Live Spaces.

pederastia-pornografia-infantil-foto-efe-2008040617325612hg2 Se necesita de la colaboración ciudadana.

Evidentemente se trata de hacer entender al usuario de Internet, que la primera barrera de protección contra la pornografía infantil son los propios padres y después los usuarios, que mientras navegan por la red pueden caer accidentalmente en sitios de este calibre y que con su denuncia facilitan el trabajo a las autoridades.

Aquí se obvia la responsabilidad de las empresas en la detección de este tipo de contenidos, más que nada porque son ellas las que poseen este tipo de archivos en sus servidores. Ellos ganan dinero vendiendo nuestros datos de usuario, los correos y todo aquello que nos pidan para registrarnos en su red. A cambio no nos dan nada, es más nos venden como mercancía y les importa un pimiento que en sus servidores hayan redes de pederastas.

Internet no es una consola.

Según el Grupo de Delitos Telemáticos de la Guardia Civil, un 28% de los niños son consumidores de porno, lo que provoca que cada vez sean más los menores adictos al sexo. Como principal problema de este dato, tenemos que con una adicción al sexo tan temprana “se pueden causar desequilibrios en su desarrollo sexual”

Internet no es una consola, es verdad, pero de nuevo volvemos a criticar solo la acción de los padres y nos olvidamos de las empresas como Facebook.

Al igual que Live Spaces con Marcelino, Facebook solo tardó 24h en cerrar un perfil que comenzaba a promover una campaña virtual masiva por internet para dar a conocer el problema de la pornografía infantil en las redes sociales.

Este dato, el de las 24h, contrasta mucho con el que Marcelino nos ofrece a través de su twitter y su En Busca del Fuego, en el que se relata que los perfiles denunciados unos días antes del cierre de su blog ante la policía y la plataforma que los contenía (Microsoft), siguen a día de hoy abiertos y mantienen esa tarea suya de acoso y derribo hacia niños y niñas que quedan con ellos en parques para hacer realidad sus monstruosas fantasías mientras los pobres niños se creen un poco más mayores de lo que son.

Y eso en el caso de que sean lo suficientemente mayores para ir al lugar de encuentro por su propio pie, puesto que no solo son niños de diez a quince años, si no que a estos se les deben sumar multitud bebes y de niños que rebajan y mucho la edad de los diez años.

Por ello creo que hay que dejar una cosa clara.

Es verdad que los padres tienen una responsabilidad para con lo que hacen sus hijos en Internet, pero no lo es menos que las autoridades y las plataformas de Redes Sociales tienen que poner un poco más de su parte en la prevención de dichos delitos y en la denuncia de los ya existentes.

No es suficiente con pedir que los padres se gasten dinero para proteger a sus hijos, las empresas también deben hacerlo. Cualquier decisión que implique hacer responsable máximo al usuario no contará con mi apoyo, ya que el usuario no tiene porqué cargar con el costo de la seguridad de empresas que sí ganan dinero con su disfrute de la red.

2 Comentarios:

    y no dicen cules son

    cierto no dicen cuales son

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