Más bien, hoy aún es ese día. El día en que por twitter las agencias de información publicaron que el comisario que dirigió la búsqueda de Marta del Castillo ha sido apartado del caso de los dos niños desaparecidos que tan impresionados nos ha dejado ésta semana. El mismo en que una vidente alertó a la policía sobre unos restos óseos que podrían haber sido los de la difunta Marta, pero que acabaron siendo de un perro.

El día en que los antes tantas veces felicitados usuarios de twitter, esos que tanto bien hacen al mundo por haberse convertido en una correa de transmisión del pensamiento del ciudadano medio, se convirtieron en subnormales a cuenta de chistes malos sobre una desaparecida Marta del Castillo. Los mismos que con su viral capacidad convierten un vídeo, una declaración o un trending topic en una revolución social, ayer se dedicaron durante unas horas a hacer chistes sobre Marta. Tan solo hace falta irse al TT en cuestión y darle una ojeada.

Del mismo modo que critiqué alguna vez esa moda de los #facts que tanta gracia hacen en la piada pajarracal del estandarte del dospuntocerismo llamado tuiter, debo censurar también la tendencia ignominiosa a realizar chistes sobre todos los temas sin importar cuan cruentos y desalmados sean. Más que nada porque es justo por ahí por donde uno puede calibrar cual es el nivel de inteligencia y civismo de quienes comparten con uno la Red de Redes y el pajarraco azul en particular.

Hay muchas clases de educación cívica y ésta se imparte en dos únicos lugares, la Universidad y la calle. A veces, viendo los perfiles de los que tuitean más a diario, compruebo que hay más de los que estudiaron en la primera que de los que lo hicimos en la segunda. Otras, como hoy, compruebo que muchos de los de la primera no debieron aprobar la signatura cuando se sacaron la carrera.

Y es que esto solo pasa en países como éste. Países que sitúan entre los diez Trendings Topics de un mismo día a Ana Obregon, a Marta del Castillo y el 15O del #15M en un mismo plano de importancia. Habrá que hacérnoslo mirar…

4 Comentarios:

    Hola Antonio...hay gente pa' todo en cualquier lado...y te digo una cosa...la Universidad de la calle complementada con el colegio de la casa, creo que es más importante que haberse sentado en la Universidad, porque la educación no solo es estudiar en libros, la educación es, sentido común, respeto, responsabilidad, coherencia, y un largo etc...y eso te lo enseña la vida....como dices tú...habrá que hacérnoslo mirar....besoooss y feliz finde.

    PD: creo que debes cambiar el cabecero...para poner: "un blog que actualiza cuando puede y quiere"...porque eso de lastimoso no me gusta...además este es tu blog....y lo manejas a tu antojo...a nosotros nos gustaría que pudieras actualizar más seguido...pero si no puedes...nos conformamos con que actualices.

    Cuando puse lo de lastimosamente ya me lo dijeron, hoy me lo dices tú también. Me miraré eso también y veré qué subtítulo le pongo finalmente al blog jejeje

    Sobre el post...es una pena que los mismos que se erigen en revolución y dignos defensores de la paz social se tornen humoristas de la más execrable calaña capaces de hacer tontadas con cosas que son muy muy serias y descorazonadoras...

    Ufff! Echale un vistazo a los TT de Argentina, yo una vez por día como mínimo me quiero arrancar los ojos. Pero uno se acostumbra a estas cosas, es como que Twitter ya va modificando su comportamiento hasta que pase lo mismo que con Facebook: Quien no lo tolere, se va a ir porque no va a querer prenderse en la misma onda.

    Yo generalmente tuiteo cosas superficiales (no da para más), salvo cuando hago posts en contra de la pedofilia, o llamados a solidaridad, o pido que le ayuden a alguien de alguna manera. En esas condiciones la gente se muestra generalmente bastante solidaria, cosa extraña, y es algo bueno porque tengo unos 2100 followers, que no es tanto, pero al menos algo es.

    De todas maneras, cada tanto me responde o me agrede algún subnormal, pero uno se va acostumbrando a Twitter. Qué se yo.

    Felicitaciones por su blog, señor!

    Muchas gracias de nuevo Ricardo. Sinceramente, en mediocridad y falta de escrúpulos no hay frontera que valgan. Ya sea Argentina como España, siempre hay capullos en flor para dar y tomar.

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